Vuelta a las andadas
Noelioku • 21 de enero de 2025
Un grupo de grafiteros detiene un tren en la estación de Metro de Avenida de Guadalajara
Un grupo de grafiteros detiene un tren en la estación de Metro de Avenida de Guadalajara

No es la primera vez que os lo cuento. Los grafiteros vuelven a las andadas, deteniendo un tren en la estación de Metro de Avenida de Guadalajara, en la
línea 2 el pasado día 19 de enero. Este hecho provocó una ralentización en la circulación
de trenes, pintando los grafiteros uno de los coches que componía el tren.
La Ley continua protegiendo a los grafiteros, sin ningún tipo de castigo debidamente castigado. El problema que se origina ante la legislación, trata de que en el año 2015 se modificó la llamada Ley Mordaza, despenalizando del Código Penal el delito de deslucimiento tal como se llama en el lenguaje jurídico, pasando en dicho año a ser una sanción administrativa.
Dado que los grafiteros se conocen la legislación vigente, siguen haciendo su agosto para hacer lo que ellos denominan "arte". No se puede seguir permitiendo que estos actos vandálicos y daños se sigan consintiendo, poniendo además en peligro la seguridad de los maquinistas y viajeros, que además ya son multirreincidencia y hay que hacer un cambio en la legislación para que el deslucimiento vuelva a estar incluido en el Código Penal, recayendo el delito
a los autores con una buena multa elevada y una pena de prisión.
No puede ser que unos individuos que cometen daños de este tipo se queden impunes, ni que estos hechos sean simplemente una sanción administrativa muy regalada. Hay que saber distinguir lo que es arte y vandalismo en este caso.
¡¡¡Basta ya de vandalismo en el transporte público!!!
No es la primera vez que
os lo cuento. Los grafiteros vuelven a las andadas, deteniendo un tren en la estación de Metro de Avenida de Guadalajara, en la la línea 2 el pasado día 19 de enero. Este hecho provocó una ralentización en la circulación de trenes, pintando los grafiteros uno de los coches que componía el tren.
La Ley continua protegiendo a los grafiteros, sin ningún tipo de castigo debidamente castigado. El problema que se origina ante la legislación, trata de que en el año 2015
se modificó la llamada Ley Mordaza, despenalizando del Código Penal el delito de deslucimiento tal como se llama en el lenguaje jurídico, pasando en dicho año a ser una sanción administrativa.
Dado que los grafiteros
se conocen la legislación vigente, siguen haciendo
su agosto para hacer lo que ellos denominan "arte". No se puede seguir permitiendo que estos actos vandálicos y daños se sigan consintiendo, poniendo además en peligro la seguridad de los maquinistas y viajeros,
que además ya son multirreincidencia y hay
que hacer un cambio en la legislación para que el deslucimiento vuelva a estar incluido en el Código Penal, recayendo el delito a los autores con una buena multa elevada y una pena de prisión.
No puede ser que unos individuos que cometen daños de este tipo se queden impunes, ni que estos hechos sean simplemente una sanción administrativa muy regalada. Hay que saber distinguir lo que es arte y vandalismo en este caso.
¡¡¡Basta ya de vandalismo
en el transporte público!!!
No es la primera vez que os lo cuento. Los grafiteros vuelven a las andadas, deteniendo un tren en la estación de Metro de Avenida de Guadalajara, en la la línea 2 el pasado día 19 de enero. Este hecho provocó una ralentización en la circulación de trenes, pintando los grafiteros uno de los coches que componía el tren.
La Ley continua protegiendo a los grafiteros, sin ningún tipo de castigo debidamente castigado. El problema que se origina ante la legislación, trata de que en el año 2015 se modificó la llamada Ley Mordaza, despenalizando del Código Penal el delito de deslucimiento tal como se llama en el lenguaje jurídico, pasando en dicho año a ser una sanción administrativa.
Dado que los grafiteros se conocen la legislación vigente, siguen haciendo su agosto para hacer lo que ellos denominan "arte". No se puede seguir permitiendo que estos actos vandálicos y daños se sigan consintiendo, poniendo además en peligro la seguridad de los maquinistas y viajeros, que además ya son multirreincidencia y hay que hacer un cambio en la legislación para que el deslucimiento vuelva a estar incluido en el Código Penal, recayendo el delito a los autores con una buena multa elevada y una pena
de prisión.
No puede ser que unos individuos que cometen daños de este tipo se queden impunes, ni que estos hechos sean simplemente una sanción administrativa muy regalada. Hay que saber distinguir lo que es arte
y vandalismo en este caso.
¡¡¡Basta ya de vandalismo en el transporte público!!!